
La técnica de la alfarería es una de las más antiguas y completas que existen, ya que involucra el uso de los cuatro elementos de la naturaleza: fuego, aire, tierra y agua. Consiste en la creación de piezas utilitarias y decorativas a través de la manipulación del barro como materia prima. Existe una gran variedad de técnicas alfareras, dependiendo del proceso de elaboración, como la cocción del barro, la decoración y el acabado: barro bruñido, barro canelo, barro bandera, barro negro, barro petatillo, barro betus y cerámica de alta temperatura.
Cada pieza está inspirada en tradiciones ancestrales, pues se plasman símbolos y elementos culturales característicos de su región; además, cuentan antiguas historias o leyendas que forman parte de nuestro gran legado histórico mexicano.